En Zaragoza se pegan o se empujan o se insultan o se zarandean los militantes de VOX mientras cenan en el restaurante Las Tres Carabelas. Si Colón levantara la cabeza se cabrearía. No se conforman con armarla en el Colón de Madrid que ahora se cabrean mucho entre ellos en el Colón de Zaragoza.
Al final todo se ha saldado con la expulsión de nueve militantes del VOX zaragozano, que igual son muchos pues no deben ser tantos. Mira que yo he visto cosas en muchos partidos políticos, cabreos y miradas, pero intentar llegar a las manos no lo veía desde hace 12 años. O más.
Por eso emplean a Zaragoza como laboratorio de todo lo que se inventa. Somos muy buenos para que nos hagan test de todo tipo y lo saben. Aquí se estrenan obras de teatro o cajas de perfumes de colorines para ver si van a funcionar luego. Así que los de VOX a nivel nacional habrán tomado buena nota. En Zaragoza, donde todo se pone a prueba, se están pegando. ¡¡jope!!