Toca repensar el futuro, para no pensar en el presente

Observar el devenir de Aragón a través de su política es cuando menos triste y debería haber servido antes para unas cuantas reflexiones que no hemos hecho. Casi nadie. 

No hay duda, están los que se lo merecen, tenemos lo que nos merecemos, y seguiremos andando como podamos. 

Pero todas las sociedades en sus historias, han andado a veces hacia el futuro, otras veces han creído que eran capaces de dar saltos en el vacío y en cambio otras simplemente han retrocedido posiblemente por ejercicios anteriores de sonambulismo y funambulismo. Mezclados pero no agitados.

Ahora toca, a todos, pensar en lo que viene a continuación. Incluso toca pensar si seguir o no seguir. Iremos viendo.

Ajovín

Mercado de Las Tres Culturas de Zaragoza. Reflexión

Introducir el Mercado de Las Tres Culturas hacia la calle Sepulcro es un gran acierto que hay que seguir explorando, aumentando. Toda esa zona entre Sepulcro y Palafox, dentro del antiguo barrio de El Boterón, tiene un gran futuro para este tipo de mercados de artesanía, incluso hasta la Plaza de la Magdalena. 

Es cuestión de años y de diseñar un modelo más de paseo, no tan amontonado. Con nuevos servicios y actividades.

Veo menos práctico el espacio de San Lázaro, aunque ame al Rabal, y creo que es momento de repensar todo pues ya está plenamente asentado.

Estadísticas de transvase de votos. Nuevos candidatos rojos, pero con Glam

Los diferentes sondeos efectuados en Aragón antes de las autonómicas eran concluyentes. El voto a Ciudadanos aquí como en casi todas partes, menos en su reducto fundacional de Cataluña, era de anteriores votantes del PP. Naturalmente se ha ido a dicho partido en su gran mayoría y a Vox, casi nada al PSOE aún más de lo previsto.

Además había un significativo vuelco de votantes socialistas que, incluso asumiendo la moderación y agradecimiento de barra de bar a las políticas de Lambán en tiempos de pandemia –en que la actuación del cuatripartito pero especialmente de Sira Ripollés fue de antología del buen hacer-, votaron exclusivamente en clave nacional, con el olor a chamusquina de los delincuentes sexuales acogidos a la retroactividad favorable, sin una sola palabra de arrepentimiento de la ministra apestada por el resto de la izquierda. 

Que ha empañado absolutamente la buena gestión “comunista” en mercado laboral o atención y gestión de ayudas a los pequeños autónomos. Desatendiendo criterios economicistas, ha sido un gobierno que no ha abandonado y ello se ha traducido en deuda, sí, pero en crecimiento económico sin dejar a muchos atrás.

Pero los votantes de centro-centro en número de más de 10.000 del PSOE zaragozano, no el oscense de Sánchez, los de los barrios que llevan a sus hijos a la concertada, votaron a la sucesora de Azcón a la que no le va a durar siempre la cuerda de la voz de su mentor y amo.

A la que es lógico que los concejales de Ciudadanos que aportaron gestión moderada y eficaz, aconsejen por ser concejales de su lista, no introducir a Vox de mi compañero de columna Julio Calvo en el equipo de gobierno. Cuando en Aragón sus intervenciones o gestión no son precisamente lo reaccionarias que se les atribuye. Nuevamente la política estatal dando sartenazos, base misma de su voto.

Que no se habló de Aragón o de Zaragoza ciudad, puede ni siquiera de Monzón ciudad que va como un tiro como estación ferroviaria nido para empresas catalanas, fue así.

Que se tiró un 10% de voto de la sociedad transformadora de la capital de Aragón y que pese que al PSOE no presentó a ninguna personalidad relevante subió algo, también.

Que la sociedad ha cambiado, es más opulenta –no sé si rica porque no lo mido en términos económicos-, que los jóvenes votan como mileuristas pero con el comodín de futuros herederos de ingentes patrimonios, que si no tienes cursos de la privada de melonadas telemáticas no ganas un concurso de méritos de estabilización o que si eres alcalde tienes que dar subvenciones hasta el sursum corda, no cuestionar a los cazadores o empadronar en Diseminados s/n, cuestión del voto por correo aparte, parece que son materias estructurales en el currículo de la real life. No se enseñan, o sí, en los master de las universidades privadas.

Hay que dominarlo porque es “el otro fútbol” o te orillan de participar. O sigue, como toda la vida, lo que te diga mosen y saca el trabajo de la tertulia de después de misa (otro sí digo para los del universo masón, no te vengas arriba, Federico…).

Como alguien tiene que elegir candidato por los sumatorios, defender el voto perdido de Zaragón de la que su no país tiene suerte, si ponemos Aragón detrás de Sumar azcaba siendo un paracaidista del entretenimiento choben que aúpan como meteoro a su carrera política, a costa no solo del inquietante líder de asambleas y aragonés electivo Echenique, sino de cualquiera de IU con una mínima experiencia, y me toca decir que excelencia, en gestión pública.

Luego no nos quejemos de las no asambleas en la derecha o de que presenten a Toni Leblanc o al presidente del Real Zaragoza o Sociedad Deportiva Huesca de turno.

Aragón, si es que existe, es una taifa moderada, no cruel, que crece, donde vamos con una gorrica con molinillo para producir nuestra propia energía, somos soles de personas porque es la tierra noble, y ponemos a chicas del aparato los de la izquierda, en vez de a alcaldesas que hayan gestionado a cara de perro.

Sí es una despedida de Lambán, aunque en desacuerdo con su política educativa y de ordenación territorial, vaya mi agradecimiento como pacificador de ese siempre escindido socialismo aragonés, buen gestor o coordinador sanitario y dejando hacer a los técnicos en las políticas sociales que conforman el Aragón del bienestar. 

Con una brillante gestión, junto al PAR y Soro, de los proyectos que se han cristalizado en Teruel provincia.

Vamos camino de que los diputados aragoneses defiendan en Madrid menos “sus fueros”, condición sine qua non que pusieron para abstenerse en la Constitución otros territorios menos históricos a los que pertenezco por RH.

Seguiremos alucinando, Sabés.

Entalto Aragón, amiguetes y chobenalla… En esto hemos quedau, don Joaquín de Graus, Eloy y José Antonio, Hipólito y Eiroa los astures.

14.06 Luis Iribarren

Zaragoza es bonita, si ella quiere

Podría ser cualquier ciudad europea de las que tienen futuro, de las que salen en los papeles como ciudades importantes y a tener en cuenta por su calidad de vida. Y en realidad lo es, con la gran ventaja teórico para sus habitantes, de que no es excesivamente conocida. Todavía.

Sí, es Zaragoza en una tarde de lluvia, que como es tan poco habitual, nos entrega reflejos y brillos, grises y suelos, poco habituales. Pasamos del "gris ala de mosca" al "gris marengo" a poco que caigan cuatro gotas.

Cuando a un alcalde insultamos —como a todos pues en esta Zaragoza nos gusta insultar a los alcaldes— por plantar tilos en el paseo Independencia, que hace décadas que ya no es paseo aunque tenga aceras anchas, tuvo que defenderse el hombre diciendo que los árboles tenían un seguro de sequía. 

Eran tan caros a los ojos de los europeos de Zaragoza, que aquellos árboles duros y que huelen muy bien, necesitaban justificarse con un seguro, no fueran a secarse y a joder las elecciones al alcalde.

Volvemos a tener alcaldesa que es una opción muy interesante pues se la insultará menos, lo cual garantiza que si tiene ganas, que de momento no lo sabe nadie, igual la dejamos hacer aunque sea para observar. 

Es curioso que el Debate Electoral para la alcaldía de Zaragoza la perdió Natalia Chueca por goleada. Y ahora los resultados le dieron la razón a los que de entrada decimos que habría que suspender todas las campañas electorales pues no sirven para nada.

Zaragoza bien se merece unas lluvias que pongas gris oscuro entre las calles de los tilos. Y se merece que se estudie bien su futuro a base de preguntarle a Ebrópolis qué podemos hacer para estar a la altura, ahora que ya somos la Cuarta ciudad de España.

De momento nos conformaremos con saber que Zaragoza es bonita, si ella quiere, que no es siempre. 

Nota.: La fotografía es del colaborador y gastrónomo Luis Iribarren

Plaza San Nicolás de Zaragoza, y sus cosas

Es la plaza de San Nicolás en los años 60, cuando yo la abandoné tras diez años de vida justo en el punto desde donde se tomó esta fotografía. Aquí nacimos los dos hermanos, en el Boterón y aquí aprendimos a jugar contra la puerta de entrada a la iglesia cuando estaba cerrada.

Era una portería fabulosa mientras no dieran balonazos, aunque pocos podíamos dar pues jugábamos con pelotas de plástico, tener un balón de cuera era imposible para los niños pobres.

En las ventanitas de la zona izquierda, las que parece que alumbran un sótano, había un criadero de conejos. La dueña de aquella vivienda que era viuda, vivía de los pocos ingresos que lograba con la venta de los animales. Nacían y debían morir a oscuras. 

Eran años casi de hambre, donde pocas familias del Boterón podían comprar conejo para comer. Pero las había. Esta imagen se debió tomar sobre los últimos años de la década de los 60, cuando ya no quedaban casi vecinos en las casas. 

Detrás de la persiana vivía un matrimonio con un hermano, y los hombres eran transportistas que encerraban su camión en el portalón rojo. 

Y no debemos olvidarnos de "La Monjera" que era la mujer que con su familia vivía en la casa aledaña a la iglesia y que hacía de suministradora a las monjas de San Nicolás, que entonces eran de clausura total.

¿Por qué faltan pediatras en Aragón, en España?

Cuando se habla de los problemas que tenemos en Aragón por los servicios imprescindibles como la Sanidad, dada nuestra personalidad territorial, con muchísimo territorio (y nos falta una salida al mar) y la poca población y la mala financiación desde Madrid para los territorios con estos condicionantes, tenemos que conocer en qué punto estamos, comparándonos con nuestros vecinos.

En este mapa vemos el número teórico de niños de hasta 14 años que no tienen atención sanitaria con Pediatra. Eso quiere decir que son atendidos por médicos de atención primaria, por la falta de pediatras en sus Zonas Básicas de Salud.

Actualmente, todas las comunidades autónomas tienen plazas de pediatría en atención primaria sin cubrir, lo que supone que unos 523.636 niños y adolescentes en España no tienen pediatra ni ningún otro médico asignado de cupo. No quiere decir que no estén atendidos o incluso bien atendidos. 

Pero dentro de este problema, de esta imposibilidad por varios motivos, donde todos tenemos parte de culpa y responsabilidad se esconde otra realidad peor.

Los lugares en donde no se puede cubrir las plazas de pediatría primero, y médicos de atención primaria después, están condenados poco a poco a desaparecer. Y eso si es un gran problema social y de despoblación imparable.

Julio Puente Mateo - Miembro del Consejo de Salud de Aragón

Zaragoza en 1824 tras la Guerra de Independencia

Esta litografía impresa y grabada por Godofrey Engelmann y dibujada por Louis Albert Guislain Bacler d'Albe nos muestra una imagen de la Zaragoza de 1824 desde la zona de San Lázaro, en el inicio del Rabal zaragozano. 

Es una obra de la colección de Alejandro Rincón y muestra con detalle aquella Zaragoza que había quedado tras la Guerra de la Independencia, con curiosidades arquitectónicas que tampoco hemos sido capaces de conservar.

La Fuente de Neptuno de Zaragoza en la Plaza de San Francisco, luego Constitución, ahora España

Vemos arriba la actual Plaza de España nada tiene que ver con esta plaza entonces llamada Constitución o de San Francisco, con la escultura del Neptuno que ahora está herido de no haberse cuidado, casi olvidado, en el Parque José Antonio Labordeta. Esta escultura la hizo el escultor de Alcañiz Tomás Llovet.

El papel que cumplió esta fuente en el centro de Zaragoza fue tremendo, pues desde ella se repartía agua en caballerías por todo Zaragoza en tonelitos, vendiéndose por parte de los llamado aguadores. No había agua corriente en las casas, y los vecinos de aquella Zaragoza tenían que ir a buscarla a las acequias cercanas, a las fuentes si en sus zonas tenían fuentes cerca, etc.

Pero había familias con problemas de movilidad por la edad, que necesitaban comprarla a los aguadores, que la cogían de esta fuente, a donde también acudían numerosos vecinos de la zona a cogerla. Estamos hablando hasta finales del siglo XIX. Las aguas empezaron a mandar en el año 1845 y se retiró en el año 1902.

Os recomiendo que observéis las paredes del fondo, de la zona actual de los alrededores de la entrada a El Tubo.

Los caballos en Zaragoza dejaban las calles cochinas

De esta imagen o tarjeta postal de la Zaragoza vieja me han gustado dos detalles curiosos, además del ya conocido edificio con la portada vieja Diputación Provincial. Uno de los detalles son los restos en la calle del paso de los caballos. Inevitable y a la vez cochino.

Pero también la sensación de pueblo grande, de lugar pequeño con carruajes tremendamente curioso y con las personas en la calle esperando al fotógrafo. nada que ver con la Zaragoza actual. No sé la fecha exacta, creo que entre 1910 y 1920, pero no puedo dar fecha correcta.

Me comenta un amigo gran conocedor de su Zaragoza, Jorge Marqueta, que esta imagen data entre 1912, pues ya está la decoración de la tienda de la Joyita, que data de esa fecha y 1916, porque todavía Miguel Ángel Navarro no había actuado en el edificio de la esquina con Independencia, en lo que fue el Banco Hispanoamericano.

Paseo Independencia de Zaragoza, cuando era paseo de verdad

No es sencillo recordar aquella Zaragoza de los años 50, con su paseo Independencia de verdad, como paseo sobre el que se paseaba. Nada se pierde definitivamente, o si.

Las dos aceras del Paseo Independencia eran independientes y por ellas circulaban de arriba abajo partes de la sociedad diferentes. Los que iban por la acera de los pares ni iban por la acera de los impares. Ni a pasear ni a ligar, pues la sociedad que circulaba por una u otra acera era diferente. 

Ya sé que eso suena a una barbaridad, pero en aquellos años era real. Y si hay dudas, preguntar a los abuelos zaragozanos. 

La nueva imagen de la Zaragoza de 2023

Es bueno, es sano que vayamos viendo poco a poco la nueva imagen de la Zaragoza que viene a partir del 2023, para que nos vayamos dando cuenta de que algo irá cambiando en Aragón en los próximos años. 

Así no nos pillará tan de repente, tan de sopetón y no nos asustará tanto la agradable nueva imagen. Sí, hay que hacer la pelota, por si acaso, que nunca se sabe.

Muchos diréis que al fin y al cabo es la bandera de nuestro país, de nuestro Estado. Y es cierto. Tal vez un poco grande y colgando de una iglesia. Pero no pasa nada. 

Excepto por los agravios comparativos. Intenta hacer lo mismo y en el mismo lugar con otro tipo de bandera, dentro de unos días, y deja claro quien eres y tu teléfono para que te llamen, y verás las diferencias de trato.

El lema de la bandera, para estar colgada en una parte que creíamos civil en una ciudad que pensábamos civil, resulta poco acertado aunque todos sepamos el motivo de elegir a San Fernando para colgar la bandera en este lugar de respeto. De profundo dolor y respeto. Pero lo uno no quita lo otro.

Lo dicho, dejo la foto porque sé que se irá repitiendo en los próximos años, que puede que sean muchos. 

Sí, es una fotografía del año 2023, sí, el siglo XXI. Si queréis comprar banderas por metros, yo qué sé, por si os apetece, en el Coso venden de muy diversos tamaños. De nada.