Zaragoza no siempre ha sido una ciudad pacífica, tranquila, donde todxs somos gente buena y agradable. También ha sido una ciudad asesina, violenta, triste, absurda. Podríamos referirnos a los errores cometidos con los franceses que nos llevó a destruir Zaragoza por unos franceses con una superioridad de fuerzas, que resistir además de un suicidio colectivo, supuso una pérdida de decenas de miles de vidas zaragozanas y la estructura histórica de una ciudad entera. Pero también esa llamada Guerra Civil pero hecha por los militares, tenemos páginas oscuras que esconder.
Vemos en esta imagen al menos dos escuadras de Guardias de Asalto (cada una se componía de 7 soldados y un cabo), custodiando el edificio de Correos de Zaragoza, en los primeros días del Golpe de Estado de 1936, al servicio de los golpistas pues Zaragoza enseguida se declaró ciudad afín al Golpe de Estado y al igual que los Guardias de Asalto de Valladolid, se pusieron a las órdenes de los sublevados, creando las primeras matanzas por fusilamiento en las ciudades donde se sublevaron, en los días siguientes al comienzo de la Guerra mal llamada Civil.
Era un cuerpo policial con organización militar, que controlaba el orden público en las ciudades y pueblos, muy especializados en las luchas callejeras y en reprimir con dureza las sublevaciones de civiles. Se creó el Cuerpo, para defender la II República contra los intentos de desestabilización, aunque en Zaragoza, y a partir del año 1936, realizaron todo lo contrario. Vestían de un azul oscuro.
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