Nunca es posible explicar por qué motivo se destruyó la antigua Universidad de Zaragoza, cuyo edificio vemos levemente a la derecha de esta imagen. Un edificio enorme, amplio, espacioso, en donde yo estuve dos años convertido ya en colegio para niños, y que es cierto, tenía un problema pero que no debió servir para destruirlo totalmente. No tenía excesivas zonas abiertas al aire libre para poder hacer deporte, aunque sí enormes zonas cubiertas a modo de recreo interior. Y una biblioteca que desgraciadamente sirvió para uso de cuervos de dos patas.
En esta imagen vemos la torre de la Magdalena sin restaurar, sin recobrar su espléndida forma mudéjar.
Como curiosidad deciros que debajo del cartel que poner "Vinos y Aguardientes", unos 60 años después de ser tomada esta imagen a principios del 1900, había un bar de barrio que fue uno de los primeros que tuvo aparato de televisión y aquello resultó tal éxito en los primeros meses, que por las noches era imposible entrar de gente del barrio que acudía a tomarse un café y ver aquellas cosas que salían de la pared.
Yo era un niño que se quedaba con mi hermano en casa, dormido casi siempre, mientras mis padres acudían a ver en blanco y negro cosas novedosas en aquel bar que hoy es una panadería histórica que empezó enfrente de ese local. Panadería que ya era un éxito y que te permitía llevar los asados en cazuelas preparados en casa, para que por un módico precio te los cocinaran en su horno de panadería. Como en los pueblos.
Hola, esta foto es de Juan Cabré Aguiló (Archivo Cabré, en Instituto de Patrimonio Cultural de España), y está datada a mediados de los años 20 del pasado siglo XX.
ResponderEliminarMuchas gracias
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