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Los partidos grandes, que ahora son pequeños, no se ocupan de Aragón. El antiguo aragonesismo pende de un hilo. El procés Cat y la crisis del 2008, que aún colea tanto, se nos han comido lo poco que quedaba de aquel efímero ímpetu. Vale. Hagamos una lista de las autovías pendientes. la mortal Nacional II, el fabuloso eje pirenaico, lo que llamamos, con tanta modestia forzosa, “desdoblamientos”.
Al Estado y sus partidos no les interesa que haya autovías en Aragón. Ni autovías ni nada. Pocos votos, y dispersos. El espacio vacío es útil a España: reserva de viento, de agua, sitio para bases y aviones, maniobras de la OTAN y gran balsa de purines.
Espacio vacío que hay que atravesar... pagando peaje. Los trenes, ni hablar. El tren de la China es el único que va a parar, con suerte y esfuerzo local (plegarias). Hagamos la lista de obras con inversiones mínimas para diez años, fundemos un partido político cuyo único ideario sea esa lista (hace unos años esto era una herejía, ahora no quedan ideas. solo mercados) y veamos si ¿alguien vota?
La única misión de ese partido aragonés básico será apoyar a gobiernos en (previsible) minoría para que, a cambio. hagan esas obras e inviertan esos millones. cuatro perras si se comparan con los fastuosos cupos y privilegios que irrigan al vecindario. Con alegría y buen ánimo hagamos la lista y las prioridades. Y una candidatura, quizá por sorteo, para obtener lo mínimo, el mínimo vital que de otra forma no llega jamás. El eje pirenaico, oh,. cielos, está en nuestras pocas manos.
Espacio vacío que hay que atravesar... pagando peaje. Los trenes, ni hablar. El tren de la China es el único que va a parar, con suerte y esfuerzo local (plegarias). Hagamos la lista de obras con inversiones mínimas para diez años, fundemos un partido político cuyo único ideario sea esa lista (hace unos años esto era una herejía, ahora no quedan ideas. solo mercados) y veamos si ¿alguien vota?
La única misión de ese partido aragonés básico será apoyar a gobiernos en (previsible) minoría para que, a cambio. hagan esas obras e inviertan esos millones. cuatro perras si se comparan con los fastuosos cupos y privilegios que irrigan al vecindario. Con alegría y buen ánimo hagamos la lista y las prioridades. Y una candidatura, quizá por sorteo, para obtener lo mínimo, el mínimo vital que de otra forma no llega jamás. El eje pirenaico, oh,. cielos, está en nuestras pocas manos.
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